Capítulo 1: Nueva presidenta.

…

Alya junto al resto de la clase, regresó enojada al parque para confrontar a Marinette, cuando ya el cielo estrellado se cernía sobre París.

Y para sorpresa de todos, vieron cómo la azabache estaba ordenando los platos, y todos los macarrones que había traído a la fiesta los dejaba en una bolsa de basura, para posteriormente botarlos en los contenedores que no estaban lejos del lugar.

-¿Se puede saber qué haces? –inquirió molesta la reportera, pero la aludida le miró seria, y luego suspiró hastiada.

-Simplemente me deshago de estos "macarrones tóxicos", no vaya ser que alguien más sea alérgico y yo no lo sepa –comentó seca la chica, para luego organizar los cubiertos-, así que he decidido no volver a cooperar con algo hecho por mí, si ustedes quieren macarrones, deberán comprarlos, ya que no quiero más malentendidos.

-¡Tú sabías que Lila era alérgica! –contraatacó Alya, pero el primero en reaccionar fue Nino, al tratar de calmarla.

-Por favor Alya, ya pasó, y además, sabemos que Marinette no sería capaz de hacer algo así… -refutó el moreno, pero Marinette se burla de su actitud.

-¿Sí sabías eso, porque no me defendiste? –reclamó la joven, para luego dirigirse al resto de sus compañeros- ¿Acaso olvidaron que nos reunimos antes para organizar todo? ¿Acaso olvidaron que les dije que iba a traer los macarrones de coco? Entonces ¿Por qué Lila no dijo nada al respecto en ese momento? –todos guardaron silencio, y Alya trató de excusarse.

-Tal vez lo olvidó, ya sabes que ella sufre problemas de memoria –Marinette se ofendió y caminó con un semblante tan frío que heló la sangre de la bloguera.

-¿Te estás escuchando? Algo así no puede olvidarse, una alergia no es un juego, pero sí para Lila, después de todo, ella ya me confesó que sólo dice lo que la gente quiere oír –declaró seca la joven Dupain-Cheng, a lo que Alya se puso roja de la indignación.

-¿Otra vez dices que ella es una mentirosa? –replicó la morena, empujando suavemente a Marinette -. Ya te dije que dejaras eso, sólo porque no te cae bien no significa que debas estar diciendo esas tonterías.

-Es cierto, Lila no es amiga de Ladybug, no viajó a Achu ni conoce al Príncipe Ali, no salvó al gato de Jagged Stone, jamás ha trabajado con Clara Ruiseñor, jamás ha tenido tinitus ni ninguna enfermedad y puedo asegurarte que a ella, ustedes no les importa en lo más mínimo, sólo son sus esclavos –el discurso duro de Marinette dejó sin habla a sus compañeros, que pasaron de la sorpresa a la ofensa.

-¡No somos esclavos de Lila! –exclamó Kim, pero a sus palabras, Marinette se rió con ganas.

-¿En serio? ¿Cuántas veces han estado tras ella cada vez que derrama sus lágrimas de cocodrilo? Alya se la pasa rogándole una entrevista con Ladybug; Nino aún espera que le consiga ese autógrafo de su director favorito; Rosita no se ha contactado con el Príncipe Ali; Nathaniel aguarda ese "contacto" con ese mangaka japonés; ni hablar de Kim y Alix que aún esperan el video-chat con su deportista olímpico favorito…

-¡YA BASTA! –le interrumpió Alya, y Marinette sólo le miró con desdén.

-¿La verdad duele? -preguntó sarcástica la azabache.

-El que ella no haya podido cumplir sus promesas… -contestó Alya entre dientes, pero una risotada de la chica la vuelve interrumpir.

- ¡JA! ¿Desde hace un año? Hasta donde sé, Chloé sí puede tener y presumir de sus contactos en tiempo record, así como ocurrió durante las elecciones de representante de curso cuando les consiguió el autógrafo de Jagged Stone –Marinette afiló su mirada hacia la bloguera, la que tragó seco-, y ni hablar cuando logré conseguirte tu primera entrevista oficial con Ladybug en menos de 24 horas, o cuando convencí a Clara que sólo saldría en su video sí ustedes participaban también.

-Eso no… -Alya quedó sin argumentos, y Marinette arremetió.

-Aunque, viéndolo desde cierto punto de vista, creo que la llegada de Lila no fue tan mala, me abrió los ojos con respecto a todos ustedes –Marinette se dirigió a la mesa, y guardó los últimos cubiertos que había traído para el picnic-, jamás han sido mis amigos, sólo unos oportunistas que se aprovecharon de mi buena voluntad, y cuándo llegó alguien "interesante y famoso" me botaron sin dudarlo, después de todo, ¿Qué es la sincera amistad de Marinette Dupain-Cheng, comparado con todas las "cosas maravillosas que ofrece Lila Rossi"? –todos guardaron silencio, y Alya pudo ver las lágrimas de rabia asomarse en el rostro de la chica- ¿Qué Marinette es su Ladybug de todos los días? Veo que les gusta mentir, supongo que por eso idolatran tanto a Rossi, ¡Pero no se preocupen! Que a partir de mañana las cosas serán cómo todos ustedes quieren. Adiós hasta entonces –Marinette los dejó con la cabeza en alto, y al grupo les tomó un momento recomponerse.

-Wow, eso fue… duro, es la primera vez que veo a Marinette tan enfadada –exclamó Nino, y el resto de sus compañeros finalmente salieron de su estupor.

-Es cierto, parece que ahora, ella nos odia –dijo triste Rosita-, aunque, parecía una persona totalmente distinta, ¿Y sí se akumatiza?

-Marinette siempre ha sido melodramática, todos sabemos eso –comentó Alya, tratando de traer la calma - ¡Ya verán que mañana todo se resolverá! Pero creo que sí sería bueno que Lila supiera que Marinette puede akumatizarse.

Esa noche, la bloguera le mandó un mensaje a Rossi, la que lo leyó en la comodidad de su alcoba, y sonrió de lado.

-Parece que al fin vas a caer, Dupain-Cheng –Lila se acomodó en su cama, muy feliz, sin imaginar que una bomba de tiempo se había activado, y que pronto, una terrible pesadilla caería sobre ella y el resto de su clase.

….

Marinette llegó a su hogar, y sus padres se dieron cuenta de inmediato de que algo sucedía con tal sólo verle el rostro.

-¿Cariño? ¿Ocurrió algo malo? –le preguntó preocupada su madre, y la chica les miró con lástima, para luego dejar los utensilios en la cocina y dirigirse a la pareja-, necesito que tomen asiento, por favor, hay algo muy delicado que debo comunicarles –la formalidad que usaba la chica al hablarles, desconcertó al matrimonio.

…

Adrien llegó entusiasmado al colegio, ansioso por probar los dulces de Marinette, así como los aperitivos que sus amigos de seguro le habían guardado para el primer receso.

Pero al poner un pie en el salón, pudo sentir lo denso que estaba el ambiente, sus amigos no tenían buena cara, claro que a excepción de Chloé y Lila, se notaba que ninguno de ellos había podido dormir bien.

-Hola Nino –le saludó el modelo a su amigo, el que cabeceaba por el cansancio-, ¿No me digas que la fiesta duró más de lo que pensaban? –preguntó bromista el rubio, pero a Nino le dieron escalofríos, en especial al recordar los ojos fríos de Marinette.

-Bueeno, no exactamente… -comento desganado el moreno.

-La verdad Adrinkis, todo se echó a perder luego que Marinette Dupain-Cheng envenenara a la presumida de Rossi –dijo desinteresada Chloé, mientras se retocaba las uñas.

-¿Qué…? –Adrien estaba espantado por lo que eso implicaría-, ¡Eso es imposible!

-Me temo que esa es la terrible realidad, Adrien –habló lastimera Lila desde su asiento, y todos le escuchaban expectante, pero el joven Agreste apretó los puños de la furia-, Marinette preparó macarrones de coco, aun sabiendo que soy alérgica a ellos –enfatizó Rossi, pero lo que no se esperó fue una expresión rencorosa de parte de Adrien.

-¿Y se puede saber por qué no dijiste nada de eso durante la reunión? –contraatacó el muchacho, y todos abrieron los ojos por la segunda mención a ese detalle-, estuviste aquí cuando se pusieron de acuerdo qué llevar para el picnic, recuerdo perfectamente que Marinette anunció que haría los macarrones de coco.

-Es que… Estaba comunicándome con el hijo de un empresario de Noruega que necesitaba urgente una reunión con el Príncipe Alí –se excusó rápido la chica, luego de sentir la mirada confundida de sus compañeros sobre ella.

-Entonces, sí estabas tan distraída que no escuchaste el anuncio de Marinette, significa que ella jamás trató de intoxicarte o algo parecido –replicó el modelo, y Lila quedó muda unos segundos, hasta que se escuchó el sonido de la campana.

-Muy bien alumnos, a sus lugares –anunció la maestra Bustier, pero antes siquiera dar la siguiente indicación, Marinette ingresó a la sala de clases, con una expresión gélida.

-Buenos días profesora, ¿Me podría dar unos cinco minutos con mis compañeros? Tengo que hacer un anuncio importante –pidió demandante la azabache, a lo que la maestra apenas pudo articular su aprobación, pero en cambio, Adrien entrecerró los ojos a la forma de hablar de su amiga, ya que ella jamás le ha dicho profesora a secas a la maestra Bustier.

-¿De qué quieres hablar ahora, Marinette? –preguntó extrañada Alya, y Lila sonrió al ver su oportunidad tornar las cosas a su favor.

-¡Oh cielos! Espero que no sigas molesta por lo de ayer, ya que fue mi culpa… -Lila lloriqueó avergonzada, llamando la atención de los presentes-, luego de hablar con Adrien, me he dado cuenta que no te dije sobre mi alergia al coco, pensé habértelo dicho, pero todas esas reuniones que tengo con Jagged y Clara, me han despistado por completo, ¿Me perdonas? –Lila esperaba que Marinette explotara de la indignación delante de todos, pero para su sorpresa, la chica sólo sonrió de lado con una mirada tan fría que sintió como si una serpiente le envolviera el cuello, lista para estrangularla. Una sensación que la hizo tomar asiento de golpe por los escalofríos.

-No te preocupes Lila, de hecho, he venido a agradecerte –la voz suave de Marinette tomó por la guardia baja a todos, mientras que Adrien sentía que se le revolvía el estómago, algo no estaba bien-, de no ser por ti, jamás hubiera conocido la verdadera cara de mis "amigos", así que he decidido lo siguiente, voy a dimitir de mi puesto de presidenta para que tomes mi lugar –la azabache tenía una sonrisa calculadora, mientras que la cara de Alya estaba marcada por el espanto.

-¿Pero qué dices? ¡La fiesta del Día de Los Héroes está a la vuelta de la esquina, ¿Y tú renuncias como si nada?! –exclamó furiosa la bloguera.

-También debo comunicar que cancelé todos los eventos y salidas a terreno de este año –comenzó a recitar tranquilamente Marinette-, pero no se preocupen, con Lila a cargo, el grupo tendrá mejores eventos, quizás puedas llevarnos tras bambalinas con Jagged Stone y Clara, ya que acabas de decir que has tenido muchas reuniones con ellos últimamente –el tono de Marinette no podía ocultar la burla, pero Lila estaba tragando duro con todas las miradas posadas sobre ella-, por cierto, el Día de los Héroes había logrado programar una salida al hospital de niños para ayudar al Príncipe Ali, y aunque también lo cancele, estoy segura que siendo tú una de sus mejores amigas, podrás conseguir que hagamos algo mejor, ¿Tal vez trabajar codo a codo con el mismo príncipe? –pregunto inocente Marinette, y la primera en chillar de emoción fue Rosita.

-¡¿Puedes hacer eso Lila?! Sería maravi… -pero la chica de rosa detiene sus palabras al sentir un escalofrío en su espalda, y al voltear, su mirada se encuentra con la de Marinette, la que parecía que iba a arrancarle la cabeza al primer movimiento. Por lo que tomó asiento en silencio, sudando en frío.

-P-por supuesto que puedo, si es que no sucede algún imprevisto… -articuló apenas Rossi, sin despegar sus ojos de la azabache, que le miraba con una sonrisa casi viperina-, pero Marinette, ¿Estás segura que quieres renunciar? Hasta el momento has hecho un gran trabajo en tus labores, que sería un desperdicio que salieras así tan abruptamente –Lila trató de sonar lo más modesta posible hacia Marinette, pero ésta sonrió… con una expresión inocente y tétrica al mismo tiempo que heló su sangre.

-No es ninguna molestia –respondió honesta la chica, para luego soltar lo siguiente-, por cierto, así como renuncio a ser su presidenta, también renuncio a ser la amiga de todos ustedes, ya que es claro que no son una buena influencia para mí.

-¿Se puede saber qué mosco te picó? –reclamó Alya, mientras que el resto estaba en estupefacción, y Adrien sentía acidez en su garganta, ¿Acaso Marinette también rompía su amistad con él?

-El mosco de la verdad –contestó tranquilamente la azabache-, ¿Cómo puedo seguir liderándolos si no confían en mí? ¿Cómo puedo darles concejos si se niegan a escucharme? Es claro que son mejores oyentes con Lila, y ¿Cómo decirlo? –Marinette hizo una pose inocente mientras pensaba-, ella es mucho mejor que yo en todos los sentidos, ya que para ustedes, yo soy la villana que busca lastimarla cada vez que puede –remarcó con hastió la joven Dupain-Cheng, y Alya volvió a sentarse en estupor luego de escuchar sus palabras- ¿Ya lo ves? No es bueno para mí seguir ayudándolos, es claro que prefieren mil veces a Lila, así que he optado por lo sano, y creo que es mejor que en quién realmente ustedes confían se haga cargo del grupo, yo ya nada tengo que hacer, ¡HA! –a su exclamación todos dieron un respingo, incluso Chloé había dejado de retocarse las uñas cuándo Marinette había empezado en su discurso-, propongo que Lila tome mi asiento al lado de Alya, después de todo, ambas serían la presidenta y vicepresidenta, sería más productivo que compartan el lugar.

-¡Pero Marinette! –Adrien brincó de su puesto, pero lo interrumpe Lila, que ya había tomado sus cosas y ahora estaba parada frente a la azabache.

-Marinette, lamento mucho todos estos malentendidos –Rossi empezó con su típico discurso de víctima, ya que en su cabeza, creía que la azabache finalmente se había rendido con respecto a sus amigos y a Adrien, que finalmente había ganado la guerra, pero Lila estaba lejos de comprender que en su momento de "victoria", estaba cavando su propia tumba-, si realmente deseas que sea la nueva representante, estaré de acuerdo si nuestros queridos compañeros no se oponen –los jóvenes guardaron silencio, pero no porque estuvieron de acuerdo, sino porque intentaban entender el comportamiento de Lila a las palabras de Marinette.

-Por lo visto es unánime –declaró la azabache, y Adrien finalmente reaccionó pero antes que pudiera oponerse, Marinette estrechó su mano a Lila-, estoy segura que harás un trabajo maravilloso, Lila.

-¡Espera Marinette! ¿De verdad estás bien con esto? –reclamó el modelo, pero la chica parpadeó curiosa, para luego sonreírle de una forma que provocó escalofríos en el joven.

-¿Pero de qué hablas Adrien? ¡Sí es perfecto! –la chica extendió los brazos hacia el sitio, mostrando su punto-, Alya podrá compartir el lugar con la mejor amiga de Ladybug, y tú podrás estar cerca de tu queridísima compañera de trabajo, ¿No es maravilloso? Después de todo, a ti siempre te ha gustado estar rodeado de gente tan especial y única como Chloé y Lila –al modelo fue cómo si le tirarán un cubo de agua fría, tan fría como las palabras de Marinette, incluso Alya había quedado en shock- ¡Bueno! Si no hay más que decir, iré al lugar que me asignaron antes ¿Lo recuerdas Alya? ¿Cuándo se te olvidó decirme que me habían cambiado de asiento? ¿Qué ni siquiera me habían consultado, y luego todos se molestaron conmigo por reclamar? ¡OH CIELOS! ¿Pero qué digo? De seguro sobreactúo, como siempre lo dices, ya que nadie se enojaría cuando le quitan su puesto, no es normal ¿Cierto? –ahora fue Alya la que boqueó, y apartó su mirada hacia la azabache por esas duras palabras-, profesora, ya todo está listo, Lila es la nueva presidenta de la clase, ahora con permiso, voy a mi lugar.

Marinette caminó hacia el fondo del salón, y sus compañeros sintieron como si una sombra fría los envolviera hasta dejarlos sin aliento.

Mientras que Adrien apretaba el lápiz con fuerza, en tanto que la docente luego de salir de su shock inicial, había dado inicio a las clases. Una jornada especialmente dura para él, ya que Lila no dejaba de tocar su hombro con los dedos constantemente para pedirle ayuda, algo que hasta Alya le molestó.

En tanto, Plagg sentía demasiada ansiedad al ver el comportamiento de la portadora de su cubito de azúcar, estaba preocupado de lo que hubiera sucedido, y para colmo, no dejaba de sisear cada vez que Lila buscaba una excusa para que Adrien volteara a verla. Fue tantas veces, que la maestra Bustier llegó a su límite.

-¡Señorita Rossi! –el chillido furioso de la mujer sobresaltó a Lila, mientras que Marinette observaba todo con una sonrisa radiante -. El joven Agreste ya le ha pedido cuatro veces que deje de interrumpirlo en sus estudios.

-Lo lamento mucho, es que me cuesta seguirle el ritmo, maestra –contestó Rossi con la voz más inocente que pudo-, creí que Adrien podría ayudarme.

-Como presidenta del curso, debe actuar con el ejemplo, y el picar constantemente el hombro de su compañero, no es el mejor –repuso molesta la mujer, y Lila bajó la mirada cohibida ante los ojos indignados de sus compañeros-, a la señorita Cesaire le va muy bien en esta materia, perfectamente puede pedirle ayuda a ella, y dejar en paz al joven Agreste –ordenó seca la maestra, y a Lila no le quedó más que obedecer.

El resto de las clases fueron tensas, todos los alumnos y la maestra sentían que algo les asfixiaba, como si el aire se hubiera vuelto denso, y un montón de cuchillas se enterraran en sus pechos. Pero la única que estaba sonriente era Marinette, la que incluso tarareaba de felicidad mientras tomaba los apuntes y resolvía los ejercicios.

Y para desgracia de Adrien, nadie le había llevado los bocadillos prometidos del picnic, aunque ese no era su único malestar. Algo le había sucedido a Marinette, e iba a llegar al fondo del asunto.

Sin mencionar la duda que a todos se les clavó en el pecho por la extraña forma actuar de Lila. La chica simpática y con grandes hazañas, ¿Por qué parecía tan ansiosa por tomar el puesto de Marinette como presidenta?

-"¿Qué está pasando?" –se preguntó Alya, al ver de reojo a su nueva compañera de asiento, la que en vez de estar tomando los apuntes de clases, observaba la espalda del modelo con ojos posesivos, que llegó a darle escalofríos.

Ya que aunque Marinette a veces se despabilaba con solo ver al joven Agreste, su mirada rebosaba en corazones cálidos, en cambio los ojos Lila eran apagados y, hasta sintió repulsión en como por unos segundos, la chica Rossi afiló su expresión, para luego volver a unos segundos a su tarea, pero no le quitaba los ojos de encima al rubio.

-Son ideas mías… -se dijo la morena, al convencerse a sí misma que estaba exagerando las cosas.

-¿Sucede algo, Alya? –le preguntó Lila, luego de haberle escuchado.

-¿Eh? No, nada, sólo que te pediré que te quedes conmigo después de clases, debemos preparar todo para el Día de los Héroes –comentó feliz la bloguera, sin notar como Lila hacia una mueca de disgusto, para luego sonreír de lado.

-Oh, lo siento, pero esta tarde ya tenía agendada una reunión con los representantes de las reservas naturales de África –respondió cómo si nada la chica, lo suficientemente fuerte para que Adrien y Nino le escucharan, pero el modelo sólo sintió asco por cada palabra que salía de Lila.

-Está bien, yo avanzaré en lo que pueda, tú solo preocúpate que salga todo bien en tu reunión –respondió entusiasmada Alya, pero Adrien no pudo evitar sentir lastima de ella al ver como Lila le veía la cara, para que la bloguera hiciera todo el trabajo al final.

En el primer receso, Adrien se dirigió a una Marinette que mantenía a raya a todos sus compañeros con su actitud cortante. Y que al verle, no se molestó en ocultar su disgusto, y darle la espalda para dirigirse a la biblioteca.

-Por favor Marinette –le suplicó el modelo, una vez que logró alcanzarla -. No puedes permitir que esto continúe…

-¿Disculpa? Si no mal recuerdo, has sido tú quién insistió en permitir que Lila continuara con sus mentiras –contrataatacó la azabache-, así que deberías ser el más feliz al verla tan bien con todos –comentó con acidez Marinette, entre tanto, Nino y Alya acaban de llegar a la biblioteca, y al ver desde lejos a la pareja, decidieron acercarse por lo tenso que se veía el ambiente entre ambos.

-Pero… -Adrien sintió un nudo en la garganta-, yo no… -al rubio apenas le salían las palabras, y Marinette le veía desinteresada, hasta que notó que Alya y Nino les espiaban detrás de unos estantes, y la chica sonrió de lado.

-Sabes Adrien, hay que he querido decirte –comentó suavemente la azabache, llamando la atención tanto del modelo como del par de morenos que escuchaban expectantes.

-¿Y qué es? –preguntó con temor el rubio.

-Verás, que después de todo lo que he pasado, me he dado cuenta de algo importante –Marinette dio un suspiro, y le clavó una mirada fría-, te odio.

-¿Q-qué.…? –el joven Agreste apenas articulo palabra, mientras que a Alya se le caía la quijada y Nino se cubría la boca por el espanto.

-Así es, te odio –soltó tranquilamente la chica-, mi vida estaba bien hasta que llegaste a ella, lo mejor hubiera sido que tu padre te hubiera mantenido encerrado en tu habitación, en vez de dejarte salir y me complicaras la vida.

-P-pero…

-Nada de peros, Agreste –aseguró mordaz Marinette, cruzándose de brazos-, tu padre no te dejaba salir, supuestamente, para protegerte de las malas influencias, pero se equivocó –la joven Dupain-Cheng, tomó sus cosas mientras seguía acribillando con sus palabras al rubio-, tú eres la mala influencia para el mundo- arremetió finalmente ella, para luego dejarlo solo sin siquiera despedirse.

-¡Viejo! –exclamó Nino, al verlo desmoronarse, y corrió junto con Alya para asistirlo.

-Ya tranquilo, Adrien –intentó calmarlo la bloguera, pero el rubio no dejaba de hipar y llorar en silencio - ¡¿Qué rayos le sucede a Marinette?! –reclamó la morena, pero Nino le detiene al verle que iba ir tras la azabache.

-Escucha, aquí los ánimos están mal desde ayer, Alya –repuso Nino, ayudando a sujetar a Adrien-, lo mejor será dejar que a Marinette se le enfríe la cabeza, y a ti también –le reprochó su novio, y Alya soltó un bufido exasperada-, además, lo último que necesitamos es un akuma.

-Por esta vez te tomaré la palabra, Nino –prometió la morena, mientras ayudaba a Adrien a salir de la biblioteca, y llevarlo a los cubículos de varones, para después esperarlos afuera.

-Oye, tranquilo, amigo… -le consoló el Dj, pero el modelo negó ofuscado.

-Nada va estar bien, y lo peor de todo, es que Marinette está en su derecho de odiarme…

-No digas eso, viejo, ella sólo ha pasado un par de días difíciles.…

-¡¿Un par de días?! –preguntó indignado, sobresaltando a Nino, para luego tener una realización - ¿Un… par de días? Por supuesto –el chico sujetó su rostro con las manos- ¡Por supuesto! Nadie puede soportar esto para siempre… soy un idiota… -se lamentó el modelo, extrañando más a su amigo.

Mientras que Marinette regresaba a su hogar, con una expresión sombría pero satisfecha al mismo tiempo.

…..

Actualidad, el Día de los Héroes

Los padres de Marinette finalmente se hicieron presentes a la plaza de la Torre Eiffel, y la azabache les permitió el paso al abrir el cerco de espinas. Preparando dos sillones de esmeraldas para ellos, al lado de Chat Noir. Todo ante la mirada expectante de la gente de París, y de los prisioneros.

-Está bien, les prometí que no les haría daño, Marinette jamás me perdonaría si lo hiciera –el matrimonio tomó asiento, pero Sabine no pudo evitar el decir su opinión al respecto.

-Puede que Chat Noir tenga razón –repusó la señora Dupain-Cheng, mientras intercambiaba miradas con el héroe felino-, no tienes que hacer esto, puede haber otra solución.

-Hay otras soluciones, madam, pero me temo que esta es la mejor, ya les había explicado, a los tres, sin importar el costo, ya estoy decidida –repusó Marinette, y una exclamación de Alya les interrumpió.

-¿Ellos sabían que no eres Marinette? ¡Eres un sentimonstruo! ¿No es cierto? –a sus palabras, la azabache se carcajeó sarcástica.

-¿Y hasta ahora te das cuenta? ¿Y te haces llamar futura periodista? –"Marinette" caminó hacia ella, portando la fotografía de lo que fue una vez la amistad entre ella y la azabache, para luego arrugarla hasta hacerla una bola y arrojarla a la cara de la bloguera- ¡QUE BUEN CHISTE! Los Dupain-Cheng tienen el derecho de saber lo que le ocurrió a su hija, pero sólo hubo un par de personas que se dieron cuenta de inmediato que yo no era Marinette, ¿Y tú te hacías llamar su mejor amiga? ¡No me hagas reír! –a los ojos de todos, el cuerpo de "Marinette" brilló en un humo rosa, hasta transformarse en una fría pero hermosa mujer serpiente albina, ataviada con un fino vestido chino de blanco inmaculado con retoques de dorado en su cintura y cuello V, su larga cabellera negro carbón ondeaba en su espalda, mientras que en su cabeza había un tupido moño dándole un toque de realeza y divinidad. Sus pupilas eran de un color cielo frío, y unas escamas adornaban sus pómulos.

-¡ERES UN MONSTRUO! –exclamó aterrada Lila ante aquella visión, y luego chilló cuando la sentimonstruo la sujetó con su larga cola, levantándola en el aire, para después ponerla de cabeza delante de ella.

-Corrección, soy un sentimonstruo cuyo deber es proteger a la joven Marinette, y mi nombre es White Snake –siseó la mujer, y luego dejó caer a la chica, la que se golpeó fuerte contra el piso.

-¿Qué clase de sentimonstruo eres? –le cuestionó Nathalie, en tanto, que White sacaba un abanico pay-pay para cubrir casi todo su rostro, dejando sólo a la vista sus fríos ojos -¡Los sentimonstruos carecen de autonomía!

-Tus preguntas no tienen sentido, sólo soy el sentimonstruo cuyo deber es proteger a Marinette de las mentiras de Lila y de la traición de los que se llamaban sus amigos, simplemente cumplo con mi deber, y ustedes dos –White les apuntó furiosa con su abanico-, al igual que Lila, buscaban dañar a Marinette, ¡USTEDES TRES PROVOCARON SU TRAGEDIA DE HACE UNA SEMANA! –la furiosa mujer golpeó su instrumento contra su mano para enfatizar sus palabras-, y por esa razón, al igual que ellos, ustedes también recibirán su juicio –White Snake se dirigió al público para declarar lo siguiente-, el día de hoy, el Día de los Héroes, se llevara a cabo el juicio sagrado sobre estas malas personas, que dañaron un alma pura como la de Marinette Dupain-Cheng, y al final de los veredictos, se les aplicará el castigo de acuerdo al crimen -Gabriel gruñó furioso al ver a Nooro flotar al lado de White Snake-, primero, comenzaremos con los principales villanos de París, Hawk Moth ,Mayura y su fiel aliada, Lila Rossi –para estupor de todos, los tres fueron arrastrados delante de White, el matrimonio Dupain-Cheng, Chat Noir y el misterioso capullo de ciruelo-, oficialmente declaro, el inicio del juicio contra aquellos que atentaron contra Marinette Dupain-Cheng –declaró solemne White Snake.

….

-¡WOW! Entonces, ¿Fue White Sanke la que le dio el puesto de presidenta a Lila? –yo asiento, mientras trabajo en nuevos bosquejos-,pero ¿Qué le pasó a Marinette?

-No spoiler…

-¿Cómo descubrió las identidades de Nathalie y Gabriel?

-No spoiler…

-¿Por lo menos alguna pista de quiénes fueron las dos personas que la descubrieron? –pregunta una última vez el gato ya con tic en el ojo.

-No spoiler…

-¡GAAAHHH! Este fic me intriga, y recién vamos en el cap 2 –y para mi sorpresa, Chimuelo asiente de acuerdo.

-De hecho es el 1°, el anterior es el prólogo –a mi respuesta, Plagg gruñe sus dientes-, el próximo cap, se sabrá del primero que descubrió a White Snake, ¡Así que nos vemos el próximo cap!

-¡STOOOOOPPP! –Plagg me interrumpe, aún con su curiosidad bullendo de su cabecita-, aún no me dices porqué el sentimonstruo de Marinette es una serpiente blanca.

-Te lo cuento en el próximo cap, tendrás que esperar hasta entonces –a Plagg se le cae la quijada, y luego se pone a morder un pañuelo por la ansiedad.

PSD: Quiero agradecer a todos los que vieron el animatic, ¡Jamás pensé que superaría las mil visitas! Y de hecho, hay algunos que me piden segunda parte, pero he aquí el problema….

No puedo hacer una segunda parte si aún no está terminado el fic.

Tal vez lo haga, una vez terminado la historia, pero no prometo nada… DX

Y aprovecho de mandar saludo a sonrais777, laurenlmprincess, Karen Agreste, OBSIDEANFURY V2, , , sofihikarichan, juanvilumbrales (que creo es también Juancho2570, Dany_Neko, Ashly_Yelena, AquaticWhisper, Roman620, Hinevampire, Julyy_10, a todos los guests y todos los muchos lectores que leen mis fics, ¡Muchas gracias!

(No puedo poner a todos porque sería una lista interminable DX, sorry)

Pero una vez más, ¡MUCHAS GRACIAS!