Capítulo 1: La Inesperada Visita de la Ministra de Educación

La Masacre de Xtalb-Ha y la consecuente persecución contra los llamados "Renegados" fueron los actos que marcaron un antes y un después en la vida de muchas familias inocentes, las cuales tuvieron que adaptarse a las normas impuestas por la Élite Tradicionalista.

Élite que, sobra decir, está intentando apostarlo todo al olvido y al silencio, todo con el fin de acallar los espantosos crímenes que se han cometido y que suponen una vergonzosa carga para sus Descendientes, quienes no podrán hacerla desaparecer con una simple disculpa pública.

¡Cobardes! ¿En serio creen que omitiendo esto de las páginas de los libros van a limpiar sus manos y sus nombres manchados con la sangre de cientos de inocentes? Ellos mismos saben que son cómplices de estos delitos y que muy pronto tendrán que pagar por los mismos.

Solo es necesario que algo o alguien que tenga una relación cercana con estos aparezca en sus vidas "Perfectas" para recordárselos.

Conde Alonso Alcudiel II, Ex Gobernante del Reino de Xtalb-Ha

Habían transcurrido aproximadamente dieciséis años desde los amargos y tristes acontecimientos suscitados en la Ciudad de los Renegados, la vida en el Mundo Fantástico parecía haber cambiado bastante, especialmente en el ámbito social y político donde era evidente que las tácticas de intimidación y represión en contra de los blasfemos habitantes de Xtalb-Ha habían dado los resultados esperados, pues ahora ningún personaje de cuento de hadas, leyenda o mito tomaba parte de las discusiones públicas relacionadas con el asunto del Destino marcado por los Libros Sagrados, asunto que, sobra decir, se convirtió en uno de los valores más importantes para una gran parte de la comunidad.

Ni siquiera los alocados y extraños habitantes del País de las Maravillas se involucraban en dicho asunto, pues era vox populi entre ellos que estaba terminantemente prohibido cuestionar al Concilio y a sus miembros más importantes, entre los cuales se hallaban la Reina Blancanieves y sus amigos los regentes de los Reinos Ella, Beauty y Charming, quienes también le ordenaron a sus súbditos y guardias reales no mencionar ni decir nada sobre lo acontecido aquella fatídica noche bajo pena de sufrir alguna sanción que podía ir desde lo económico hasta el daño físico.

Al final, todos acataron las órdenes y disposiciones sin objeción, algunos por miedo a las represalias y otros más por la vergüenza que sentían de saber que habían sido parte de un acto sumamente cruel y malvado, un acto que ni siquiera el más perverso villano hubiera podido ser capaz de realizar debido a que uno de los mandamientos más importantes dentro de la sociedad era aquel que dictaba que estaba prohibido matar a un Ente Mágico o Legendario, especialmente si este no había cometido una acción que lo hiciera merecedor de la muerte.

El transcurso de los siguientes años a la masacre fue bastante convulso y oscuro para muchas familias fantásticas, no solo por el trauma que ocasionaba en ellos saber que sus soldados habían actuado peor que una tribu de trolls o un ejército de barbaros, sino también por el hecho de que el responsable intelectual de tan macabra acción no se había conformado con aquellas muertes, pues todavía exigía penas y castigos más duros contra los Renegados sin importarle que estos ya hubiesen aceptado su Destino tal y como lo dictaban las escrituras.

Afortunadamente, este psicótico personaje pronto desapareció de la vida pública al igual que el odio, la maldad y la crueldad que durante casi siete años había estado propagando entre los miembros de la élite, quienes, para evitar alguna demanda o juicio en su contra, decidieron fingir ante el pueblo que habían sido traicionados y engañados por aquel sujeto de cuento olvidado cuyo nombre fue incluso borrado de los libros de historia para siempre por órdenes directas del Sagrado Concilio de las Historias.

Independientemente de cómo hubiese terminado aquel vergonzoso hecho, lo cierto es que, más allá de la penumbra que se vivía en aquellos tiempos, también hubo algunos sucesos que trajeron felicidad y dicha a muchos miembros del Mundo Fantástico, siendo quizás el más importante el Nacimiento de los Herederos o Erben, que era el nombre con el que se le conocía a aquellos niños y niñas que se encargarían de recontar nuevamente la Historia de sus Padres Fantásticos, quienes veían en ellos el pilar más sagrado que existía en este mundo tan contradictorio como fascinante.

Entre los alumbramientos más celebrados en aquellos años se encontraba en primer lugar el de Apple White, la Hija de la Reina Blancanieves y Heredera del Trono del Reino White, quien era una hermosa niña de piel blanca como la nieve y cabellos dorados cual rayos de sol, la cual, con el pasar del tiempo, demostró que había heredado muchos de los dotes y talentos que dictaba el cuento de su madre como la amabilidad, la bondad, el canto y, como era de esperarse, la belleza, que era esencial para que esta cumpliese con su destino como la próxima Blancanieves.

El segundo alumbramiento que igualmente fue tema de cotilleo entre muchos miembros de la comunidad de los cuentos de hadas fue el relacionado con la Familia Charming, cuyo matrimonio conformado por el Rey Lance Charming y la Reina Catherine Charming tuvo no uno ni dos, sino dos hijos varones y una hija, siendo esta última la manzana de la discordia dentro de aquella numerosa familia debido a que nunca antes en la Historia de esta Milenaria Dinastía había sucedido un acontecimiento similar en el que existiese una Princesa Charming.

Daring, Dexter y Darling fueron los nombres elegidos por ambos reyes para bautizar a sus tres pequeños retoños, aunque Darling sería la única de los tres que recibiría una mayor presión por parte de sus familiares y parientes cercanos, pues, el simple hecho de que no existiese un cuento para ella le obligaba a escribir el suyo de manera correcta.

Por lo que todos esperaban a que el mismo siguiera el modelo clásico y tradicional de la Damisela en Apuros, ya que… ¿Quién querría ser parte de un cuento sobre una Princesa Guerrera?

El tercer alumbramiento que también fue comentado por propios y extraños en aquellos momentos álgidos fue el de la Princesa Ashlynn Ella, Hija de Cenicienta y Heredera del Trono del Reino Ella, quien era una hermosa niña de piel blanca y cabellos color naranja, la cual, a diferencia de otros niños y niñas de su generación, comenzó a ser educada desde muy chica para que se acoplara a su papel dentro de su cuento de hadas.

Tanto así que era obligada a hacer los deberes del castillo y a vivir en medio de la servidumbre, todo ello con el fin de que esta, según su madre, formara un carácter perfecto y apto para obtener el Final Feliz para el que ella estaba predestinada.

Desafortunadamente para la Dama de la Zapatilla de Cristal este objetivo personal tenía un pequeño obstáculo, un obstáculo llamado Hunter Huntsman, el Hijo Único de la Familia Huntsman y Heredero del Manto del Cazador, quien, escabulléndose por los jardines reales del Palacio, siempre lograba reunirse en secreto con su hija para regalarle flores, frutos del bosque y otros obsequios que no eran agradables ante los ojos de la Reina Cenicienta, la cual, harta de dicha situación, negocio con los padres de aquel pequeño infante para que estos abandonaran su reino y se fueran lejos donde no pudieran volver a acercarse a su hija, algo que no hace falta decir que fue efectivo al menos por un tiempo.

El cuarto y penúltimo alumbramiento más importante de la época fue el relacionado con la Familia Beauty, la cual, a través del matrimonio conformado por la Bella Durmiente y su esposo el Rey Friedrich II, sorprendió al Mundo Fantástico al dar a luz no a uno ni a dos, sino a ocho hijos varones y una hija, siendo esta última la preferida y la consentida de toda la Familia Beauty por el simple hecho de ser quien cargaría con el Legado de la Dinastía de la Bella Durmiente.

La pequeña niña no era muy diferente a su madre, pues poseía una suave piel bronceada clara y un cabello largo color castaño con mechones de color rosa. La infanta fue bautizada con el nombre de Briar Rebecca Katherine Rose Beauty, un nombre largo y un tanto pomposo que había sido elegido por su propia madre y su abuela debido a que ambas deseaban que la niña fuera la viva imagen de las Bellas Durmientes del pasado y que mejor manera de hacerlo que poniéndole a la bebé los nombres de las mejores portadoras de dicho título.

El quinto alumbramiento, y quizás el menos celebrado por la mayoría de la sociedad, fue el de Raven Queen, la Hija de Evelyne Queen y la Futura Portadora del Manto de la Reina Malvada de Blancanieves, quien era una hermosa niña de piel pálida y cabello color negro con mechones de color morado que, a diferencia de su madre, se alejaba bastante del papel que le dictaba su cuento y prueba de ello era su pasión por la música, su compasión hacia los grupos más vulnerables y desfavorecidos de la sociedad, así como su actitud rebelde y crítica hacia muchos de los valores e ideas que se difundían en su entorno, siendo el concepto del Destino el que más odiaba debido a que no le agradaba la idea de estar predestinada a ser una villana como su madre, la cual había sido encerrada en la Prisión del Espejo cuando ella había cumplido apenas un año de nacida.

Este odio hacia el Destino por parte de la Hija de la Reina Malvada, junto con sus eternos cuestionamientos a los valores y normas sociales de la comunidad fantástica, se hizo aún más evidente cuando esta fue inscrita en Ever After High, una escuela mágica y estricta donde desde hace varios siglos atrás se guiaba e instruía a los Herederos de los Cuentos de Hadas, lo cual, para la adolescente, se traducía como un sitio perfecto en el que podía investigar y a su vez cuestionar su papel en este mundo, no por nada ella solía hacerle preguntas incomodas a los profesores, quienes, acostumbrados a seguir las reglas y las antiguas tradiciones, solían evadir casi siempre estas dudas existenciales con alguna respuesta cortante o con un simple regaño.

-Esas cosas no se preguntan, Señorita Queen -respondió con firmeza la Profesora de Mala Gestión del Reino durante una de las primeras clases que la adolescente había tomado tras ser aceptada en aquel prestigioso colegio -Tenemos la obligación de cumplir con el Destino para mantener el orden y el equilibrio de nuestro mundo.

-Pero… ¿No sería más conveniente que un villano se reformara en lugar de ser simplemente castigado por unos actos que él fue obligado a cometer solo para beneficiar el Final Feliz de otra persona?

-Se desvió del tema, Señorita Queen -replicó la Profesora de Mala Gestión del Reino -Mejor continue con la lectura sobre los Beneficios de la Corrupción para el Surgimiento de los Bandidos Generosos.

Esta primera discusión en clase, junto con muchas otras más, formaron gran parte de los primeros años de la vida escolar y social de la Hija de la Reina Malvada, lo cual a su vez provocó que, para muchos de sus compañeros de clases, Raven comenzara a ser vista como un monstruo anormal que debía ser ignorado y dejado de lado por todos. No por nada la propia chica llegaba a escuchar los comentarios y chistes, a veces excesivos, que los chicos y chicas de Ever After High solían hacer no solo sobre ella, sino también sobre su familia y, por supuesto, su madre.

-Estas destinada a ser malvada y no puedes evitarlo -dijo con un tono burlón un chico de cabello color marrón que portaba un gorro de molinero cuando vio pasar a la joven hechicera por uno de los pasillos que conducían a la Castillería -Acabaras mendigando en la basura y siendo un parásito social, Queen.

-Agh… ¡Ve a moler trigo, Albrecht! -contestó Raven Queen intentando ignorar al adolescente que le había ofendido para después proseguir con su camino -Yo no soy mala, ¿Es que acaso no pueden llegar a entenderlo?

-Dicen en los calabozos que Raven ya está empezando a sentir celos hacia Apple White, todo porque ella es más bonita, lista y amable -le dijo una chica de cabellos plateados que usaba una diadema con moño color azul a una de sus amigas en cuanto vio entrar a la Hija de la Reina Malvada en la Castillería -Aunque aún me pregunto: ¿Desde cuándo los monstruos anormales como ella pueden venir a estudiar con nosotros?, ¿Es que acaso no se ha visto en el espejo? Parece una bruja arrugada y marchita cuya belleza se fue volando en algún tornado proveniente de Oz.

-No soy mala… no soy… mala -pensó Raven Queen sentándose rápidamente en una de las mesas solitarias de la Castillería para colocar un libro frente a ella y así poder ocultar las lágrimas que brotaban de sus ojos debido a los comentarios hirientes que había escuchado por parte de aquella chica -Solo quiero una vida normal… solo quiero ser… feliz…

Aquella dolorosa experiencia que había llevado hasta las lágrimas a la joven solo fue una de varias que se repitieron durante los primeros tres años escolares, años en los cuales ninguno de los profesores y miembros del personal académico de Ever After High se tomó la molestia de detener las conversaciones y comentarios dolientes en contra de la hechicera.

La excusa para no hacerlo no podía ser menos ridícula, pues el propio Director Milton Grimm, un hombre de piel clara con cabello y bigote gris oscuro y quien solía vestir trajes finos de color azul oscuro, le había ordenado a todos sus colegas de trabajo y empleados que ignoraran aquellos abusos debido a que consideraba, al menos en su forma de pensar tan arcaica y obsoleta, que estos podrían llevar a Raven Queen por el camino del mal al acumularse en su corazón tanto odio, resentimiento y rencor en contra de sus compañeros.

Sin embargo, y para mala fortuna del Director de Ever After High, esto nunca sucedió gracias a que, justo en el segundo año de estudios, la Hija de la Reina Malvada tuvo la maravillosa oportunidad de tener como compañera de habitación a Madeline Hatter, una hermosa chica de piel clara y cabellos rizados color azul turquesa oscuro con mechones de color azul turquesa claro y morado quien era Hija del Sombrerero Loco y la cual, a comparación del resto de los alumnos de la escuela, jamás llegó a insultar ni a temerle a la joven hechicera. Al contrario, la comprendía bastante bien y no por nada se convirtió en la mejor amiga y confidente de esta.

- ¿Por qué te juntas con esa anormal, Madeline? -preguntó indignado en una ocasión Albrecht al ver que la maravillana protegía de los insultos a la Hija de la Reina Malvada - ¿Es que acaso tú también eres una inmunda y sucia…?

- ¡No te atrevas a soltar la lengua con ese veneno de serpiente, Müller! -interrumpió Madeline Hatter abofeteando al chico y dejando a varios alumnos sorprendidos debido a que nunca antes la Hija del Sombrerero Loco había actuado así - ¿Es que acaso no ves que el pequeño cuervo no desea seguir posado sobre el árbol cuyas sombras impiden que abra sus alas?

-Ergh… Está bien, tú ganas esta vez -respondió el chico sintiéndose un tanto confundido debido a que no había entendido lo que la chica le había querido decir, después volteó a ver a la joven hechicera diciendo -Tienes suerte de que no entienda el enigmañol, pero no creas que solo por ello dejaras de ser para nosotros la vieja y horrible bruja del cuento de Blancanieves.

-Eso ya lo veremos cuando sea el Día del Legado, Albrecht -contestó Raven Queen mientras observaba como el chico se alejaba molesto y refunfuñando debido a su vergonzosa derrota -Solo espero… que pueda negarme a ser mala, eso es lo único que quiero.

Tras aquella última discusión que pondría fin al hostigamiento que había en contra de ella, la Hija de la Reina Malvada tuvo que prepararse intensamente durante un año para lidiar con el Día del Legado, el cual era una ceremonia pública en la que los alumnos de Ever After High debían firmar el Libro de Cuentos Legendarios para así poder asegurar su Destino y anunciarle al Mundo Fantástico que ellos estaban más que dispuestos a seguir los pasos de sus antepasados.

Por desgracia para el Director Grimm y la Princesa Apple White, quien apenas iba entablando una relación cercana con la joven hechicera debido a ciertos "cambios" que ella misma había hecho al inicio del cuarto año escolar, Raven Queen no tuvo ningún reparo en anunciarle a todos sus compañeros y maestros que ella no estaba dispuesta a seguir su Destino como la siguiente Reina Malvada y que en su lugar buscaría forjar su propio Destino y construir su propio Final Feliz.

El suceso causo consternación en unos y alegría en otros, pues muy pronto se reveló ante la sociedad fantástica que en los pasillos y aulas de Ever After High no todos los Herederos estaban dispuestos a seguir los pasos dictados por los Libros Sagrados, lo cual, para la mayoría de los padres, se tradujo como un desafío a los valores tradicionales y un desacato directo a la autoridad encarnada en el Sagrado Concilio de las Historias que decidió no hacer nada ante aquel acto que evidentemente mostraba la debilidad del Modelo Educativo impuesto en Ever After High hace no menos de quince años.

-No se hará nada, no voy a cambiar nada -declaró el Líder del Concilio durante una entrevista realizada por uno de los periódicos del Reino Beauty -Este asunto de Royals y Rebels lo debe resolver Milton, no yo.

-Lo entiendo, pero… la educación también es parte de las responsabilidades y compromisos que tiene el Concilio con la sociedad fantástica -le espetó el entrevistador al Líder del Concilio - ¿Cómo es posible que no esté preocupado por esta situación que evidentemente podría llevarnos de nueva cuenta a los Tiempos Oscuros?

-El responsable de los Tiempos Oscuros está muerto y enterrado, muchacho -respondió el Líder del Concilio con cierta molestia y temor debido a que le disgustaba que se hablara de dicho tema -No hay porque alarmarse, esta lucha interna dentro de Ever After High se acabara muy pronto y no creo que llegue a más.

Tras aquellos comentarios por parte del Líder del Sagrado Concilio de las Historias, el ambiente político y social pareció volver nuevamente a su cauce normal, pero, lamentablemente, los sucesos del Día del Legado solo fueron el comienzo de los problemas tanto para Ever After High como para los funcionarios del Concilio, quienes, desde la lejanía, pudieron ser testigos de la Destrucción del Libro de Cuentos Legendarios a manos de Raven Queen, del pequeño reinado de la Reina Malvada sobre la escuela durante el Proyecto de Reinstauración del Juego de Dragones y, para cerrar con broche de oro el año escolar, del Hechizo Invernal lanzado por el Rey de las Nieves, el cual se encontraba bajo los efectos de un maleficio provocado por los residuos de magia oscura dejados por el Espejo de la Reina Malvada.

Y si bien todos estos lamentables hechos pudieron pasar fácilmente inadvertidos por la comunidad fantástica y ser olvidados en tan solo unas semanas, la realidad es que, para el Sagrado Concilio de las Historias, el Incidente del Hechizo Invernal había sido la gota que derramó el vaso, pues era evidente que la lucha entre Rebels y Royals lo único que ocasionaba eran problemas que no tardarían mucho en llevar a la sociedad a una pugna política de tan gran escala que pondría en peligro los puestos ocupados por varios miembros importantes del Concilio, especialmente de aquellos que solían tener una posición más conservadora y apegada a las antiguas normas.

Por suerte para estos políticos de vieja cepa ya había una persona trabajando en el caso desde hacía mucho tiempo, más específicamente una funcionaria de alto nivel, la cual, desde el Desacato de Raven Queen, había estado muy al pendiente de los acontecimientos que se suscitaban en aquella escuela que para entonces parecía haber logrado dejar atrás sus diferencias para unirse en torno a un solo objetivo: Construir un Destino Digno para Todos.

Esta funcionaria era nada más ni nadie menos que la Ministra de Educación Utz-Colel, una hermosa mujer de piel morena, cabello lacio color negro y ojos rasgados que solía sobresalir por encima de otros funcionarios del Concilio debido a que, la mayoría de las veces, portaba un bello vestido blanco con estampados en forma de flores, todos estos bordados con hilos de oro y plata y que destacaban aún más cuando esta servidora pública aparecía frente a todos llevando su fina diadema de jade decorada con diamantes azules y su cetro hecho de madera de ceiba que tenía grabado el símbolo de un pergamino y una pluma.

La Ministra había pasado varios días examinando todos y cada uno de los expedientes relacionados con los Incidentes de Ever After High con el fin de analizar y tomar una decisión en torno a las acciones que se debían seguir para solucionar aquellos conflictos que ponían nerviosos a varios burócratas y miembros del Concilio, especialmente al Líder de este quien ya no tenía pretextos para poder seguir ocultando la evidente crisis que había dentro de aquella institución educativa.

Faltaba poco para la medianoche y en el interior de una pequeña oficina decorada con pinturas al óleo que representaban pasajes de Historias Legendarias, bustos de mármol de personajes importantes y muebles de madera fina cuyo aroma era por demás exquisito, la Ministra Utz-Colel se encontraba sentada en su escritorio revisando los últimos expedientes que le faltaban, siendo acompañada únicamente por la luz de una lampara y un pequeño elfo de piel bronceada y cabellos cafés quien, con impaciencia y nerviosismo, realizaba varias anotaciones en un pequeño cuaderno que sostenía en sus manos.

-La Reina Blancanieves aprisionada en el cuerpo de una serpiente al igual que el resto del personal académico de Ever After, todos ellos convertidos en animales gracias a la magia oscura -decía la Ministra de Educación mientras revisaba, con ayuda de una lupa, la fotografía que el Ministro de Seguridad Interior le había proporcionado y en la cual se podía apreciar a Raven Queen siendo abrazada por la Reina Malvada -Nunca pierdes tu sentido del humor, ¿Verdad, Evelyne?

-No creo que todo esto sea motivo de risa, su Excelencia -dijo el elfo -La Reina Blancanieves es una de las miembros más importantes del Concilio y una de las gobernantes que más aportaciones hacen a nuestras arcas, por lo que merece al menos un poco de respeto y consideración de parte de usted.

-Blancanieves es una víbora rastrera y engañosa que se oculta tras esa belleza primaveral, siempre lo ha sido desde que la conozco -respondió la mujer viendo con seriedad a su pequeño compañero -No por nada su marido la dejó sola en cuanto se enteró que andaba coqueteándole al Rey Croakington.

-Ehm… Yo… ¡Como sea! El asunto es que la actitud de Raven Queen solo ha traído desgracia y problemas a nuestro mundo, eso sin mencionar todos los daños que ha causado en otras tierras como en el País de las Maravillas cuyos habitantes ahora pueden salir del Pozo de las Maravillas sin problemas y llevando la locura a todas partes.

- ¿En serio eso te parece algo malo? -preguntó la Ministra de Educación arqueando la ceja y sintiéndose sorprendida por la acusación que hacía el elfo - ¿Quién piensa que eso es un delito grave?

-Sir Thomas Lancelot, su Excelencia -respondió el elfo -Él fue quien realizó la acusación ante el Tribunal Supremo e incluso hizo la petición al Líder del Concilio para que este ordenase el arresto inmediato de la Señorita Queen y así poder juzgarla por sus crímenes en contra de la paz y el orden.

-Lancelot es un imbécil al creer que haciendo eso va a solucionar este problema que claramente es de mi jurisdicción -dijo la Ministra Utz-Colel con un tono de voz que denotaba cierta molestia por las palabras que la pequeña criatura había dicho - ¿Y dices que el Director Grimm no ha hecho nada para remediar esto?

-Nada, lo único que ha hecho es ocasionar una larga cadena de desastres y todo por su falta de temperamento para poner en cintura a esa chica maniática que pretende destruir el orden establecido para llevar a nuestro mundo a la anarquía absoluta.

-Debo admitir que esto es algo que no me esperaba por parte de Milton -dijo la mujer dejando la fotografía que tenía en sus manos en el escritorio para tomar otra que mostraba al Director Grimm y a su hermano usando palas para retirar la nieve que había en los pasillos de la escuela a causa del Hechizo Invernal -Él solía ser muy estricto, muy apegado a las reglas, muy…

-Muy fiel a nuestras tradiciones sagradas, su Excelencia -interrumpió el elfo -Lo malo es que ahora ya no podemos tratar a esa sucia Renegada como se merece, podría servir de escarmiento para todos esos que pretenden salirse del…

En ese momento, un fuerte golpe proveniente del escritorio se escuchó rompiendo la conversación que el pequeño elfo estaba teniendo con la funcionaria, la cual se puso de pie rápidamente para acercarse a su pequeño compañero y jalonearlo de la oreja haciendo que este soltara el cuaderno a la vez que dejaba salir un pequeño chillido que era apenas perceptible.

- ¿Cómo fue que llamaste a Raven Queen, Bouldrom?

- ¡AHHH! ¡Lo siento! Me olvidaba de que esa palabra estaba prohibida cuando se decía frente a usted… ¡AHHH!

-No vuelvas a decir ese horrendo y asqueroso apodo frente a mí, Bouldrom -ordenó la Ministra de Educación soltando la oreja del elfo para posteriormente caminar hacia la ventana de su oficina y admirar el oscuro paisaje que se hallaba justo frente a ella -Si Lancelot cree que puede seguir expresando sus ideas rancias entre los miembros del Concilio esta muy equivocado y no se lo voy a dejar pasar tan fácilmente.

-Ahm… Su Excelencia, usted no puede declararle la guerra a Sir Lancelot así como así -dijo el elfo sobándose su oreja y dirigiéndole una mirada de preocupación a la Ministra -Recuerde que es amigo de gente muy poderosa e influyente, no por nada tiene el respeto y el cariño de los miembros más conservadores del Concilio, los cuales por cierto… son mayoría.

-Yo no quiero desatar una guerra, Bouldrom -contestó la Ministra Utz-Colel -Quiero evitar una y la mejor manera de hacerlo es haciendo algunos pequeños cambios que podrían ser controversiales para muchos, pero necesarios si queremos mantener la paz y la concordia entre todos nosotros.

- ¿Y qué es lo que tiene en mente, Señorita Colel?

-La Señorita Queen no es el problema, es la solución y creo que lo mejor es hacerle una visita exhaustiva y personal.

- ¿A la Señorita Queen?

-No, a Ever After High y a todos sus alumnos en general -respondió la mujer dándose la vuelta para después caminar nuevamente a su escritorio y sentarse sobre este, luego tomó una fotografía que se hallaba sobre este diciendo -Quizás la idea de buscar tu propio Final Feliz no sea tan mala después de todo, ya se ha derramado mucha sangre en el pasado y ahora nos toca construir un futuro diferente.

-La lamentable perdida de su hermana fue dolorosa para todos, pero no es motivo para buscar alterar el orden natural de las cosas -protestó Bouldrom mientras tomaba el cuaderno que se le había caído - ¿Qué pensara el Líder del Concilio en cuanto se entere?, ¿Qué pensaran los Regentes? Podrían destituirla solo por intentar hacer una locura como la que usted propone.

-No te preocupes, Bouldrom -dijo la Ministra de Educación esbozando una tierna y a la vez maliciosa sonrisa en su rostro -Las mujeres tenemos formas de convencer, estoy segura que aprobaran este plan tan pronto llegue a sus manos.

-Ah… Que el Gran Autor nos proteja de este mal augurio -exclamó el elfo suspirando y viendo hacia el techo de la oficina.

-En fin, quiero que le envíes unas cartas a las siguientes familias y personas -dijo la Ministra Utz-Colel dejando la fotografía en su lugar y tomando de su escritorio un pergamino que tenía inscrito una lista de nombres relacionados con varios personajes importantes dentro del Mundo Fantástico - ¡Oh! Y habla con la Directora Bloodgood para que prepare el Spiegel, quiero que mi hija este a mí lado en este momento tan importante para todos.

-Entendido, su Excelencia -respondió Bouldrom haciendo una reverencia para posteriormente salir de la oficina rápidamente y cumplir las órdenes que se le habían dado.

La Ministra de Educación, en cambio, se acercó lentamente hacia la lampara para apagarla dejando aquella habitación en silencio y sin nada de ruido para luego caminar igualmente hacia la puerta y salir de aquel sitio esperando que su plan resultase lo bastante exitoso para cambiar al Mundo Fantástico y así poder resarcir el daño que años atrás se le había hecho a los habitantes de Xtalb-Ha.


El reloj marcaba las 7:00 de la mañana y el sol ya había empezado a salir entre las montañas dándole paso a un nuevo día, uno que pintaba para ser otro más en la vida de los habitantes del Mundo Fantástico y en particular de los jóvenes estudiantes de Ever After High, quienes, en cuanto notaron la llegada de la luz proporcionada por el Astro Rey, despertaron soltando un profundo bostezo que era bastante imperceptible gracias al trino de los pájaros, muchos de los cuales se posaban frente a la ventana de un dormitorio en particular, el cual se encontraba ubicado en la parte más alta del castillo de Ever After High.

Dicha ventana comunicaba a una enorme habitación que estaba dividida en dos y cuya decoración estaba organizada de la siguiente manera:

El lado izquierdo tenía sus paredes forradas de tapiz color morado oscuro con detalles plateados, la pared cercana a la ventana tenía pegados algunos carteles relacionados con cantantes y bandas de rock pesado bastante conocidas. También, en aquella pared, se encontraba colgado un juego de espejos de diversos tamaños y cuyos marcos estaban hechos totalmente de hierro oscuro.

Bajo estos se hallaba una cajonera de ropa sobre la cual reposaban unas velas amarillas y un cráneo con una corona de oro encima. Al lado izquierdo de este mueble se encontraba una guitarra eléctrica color blanca con detalles color purpura claro, así como un pilar de mármol negro que sostenía una cabeza de maniquí sobre cuyas sienes descansaba una corona de plata con forma de alas de cuervo.

La cama que estaba en aquel sitio era de madera fina, estaba pintada de color negro y su cabecera resaltaba debido a la muy peculiar escultura de madera que tenía en la punta, la cual poseía la forma de un cuervo cuyas alas abiertas parecían resguardar el sueño de su ocupante, quien era nada más ni nada menos que Raven Queen, la Hija de la Reina Malvada y Líder de los Rebels.

Por otra parte, el lado derecho de la habitación tenía las paredes forradas de tapiz color blanco con detalles dorados y la única decoración que había en aquel lugar eran varios espejos de oro y plata que colgaban de la pared, así como un enorme jarrón hecho de porcelana que tenía grabados varios detalles en color amarillo.

También en dicho sitio se encontraba una cajonera y, junto a esta, un armario de enormes dimensiones dentro del cual podrían caber cientos de vestidos, atuendos, zapatos y joyas extremadamente costosas.

La cama, a comparación de la que se encontraba al otro lado de la habitación, poseía un dosel cubierto de cortinas rojas hechas de tela fina, estaba pintada de colores blanco y dorado y tenía tallada en la cabecera la figura de una enorme manzana roja, que era el símbolo con el que se identificaba a su ocupante quien era nada más ni nada menos que Apple White, la Hija de Blancanieves y Líder de los Royals.

-Agh… ¿Puedes decirles a tus aves que dejen de trinar en tu ventana al menos una vez? -preguntó Raven Queen cubriéndose la cabeza con la almohada e intentando no escuchar los sonidos que emitían los pájaros y los cuales parecían hacerse aún más fuerte -Ah… Está bien… ¡Está bien! ¡Ya me levantó! Ah… Gracias por arruinarme mi primera mañana de fin de semana -dijo la Hija de la Reina Malvada levantándose de la cama y poniéndose de pie para después caminar en dirección hacia su cajonera, no sin antes soltar un último bostezo.

-Oh… Vamos, Raven -dijo Apple White levantándose también de la cama y poniéndose de pie al tiempo que esbozaba una alegre sonrisa que era tan característica de ella -No me dirás que no son un excelente despertador a comparación del hipogrifo que estaba al lado de tu ventana.

-Sinceramente, extraño a ese hipogrifo -contestó la Hija de la Reina Malvada mientras caminaba en dirección hacia el biombo que se encontraba cerca de su cama y en donde ella rápidamente procedió a cambiarse -Aunque… deberíamos darle gracias al Director Grimm por haberlo corrido, realmente se ha vuelto demasiado cascarrabias últimamente.

-Bueno, no es fácil dirigir una escuela como esta y menos con tantos problemas últimamente -dijo la Hija de Blancanieves al tiempo que cerraba su armario para posteriormente caminar en dirección hacia otro biombo que igualmente se encontraba cerca de su cama -Por cierto, ¿Cómo amaneciste?

-Pues… supongo que bien, finalmente pude descansar después de muchos días de desvelo por los exámenes -respondió Raven Queen saliendo de detrás del biombo para luego verse en el enorme espejo que se encontraba recargado cerca de la entrada de la habitación -Ha sido la peor semana que he tenido. Demasiadas tareas, proyectos y trabajos finales.

-Todo sacrificio tiene su recompensa, eso es lo que mi madre siempre dice -dijo Apple White mientras terminaba de abrocharse sus tacones rojos para después salir de detrás del biombo y verse igualmente frente al enorme espejo que se encontraba cerca de la entrada, solo que este estaba en su lado de la habitación -Hablando de madres, ¿La Reina Malvada sigue enfadada contigo por lo de… el Juego de Dragones?

-No, lo tomó demasiado bien -contestó la Hija de la Reina Malvada -Al parecer le agradó el hecho de que la traicionara. Según ella eso me hace malvada, aunque yo opino todo lo contrario. Incluso creí que tu madre podría hacerle algo peor como represalia por haberla despojado de su cuerpo para convertirla en una serpiente.

- ¿En serio creías que mi madre iba a lastimar a la tuya solo por venganza? -preguntó la Hija de Blancanieves sintiéndose un poco ofendida por las suposiciones de su compañera de habitación -Ella jamás lastimaría a nadie, pero si me pidió que te dijera que solo tuvieras más cuidado al hablar con tu madre.

-Lo tomaré en cuenta, pero espero que igualmente tú lo hagas -respondió Raven Queen negando con la cabeza debido a que no podía creer que la madre de su compañera siguiera suponiendo que ella había sido la verdadera responsable de liberar a la Reina Malvada -Cambiando de tema, ¿Tienes algún plan para hoy más allá de tus "Labores" de Apple?

-Estoy pensando en ir con Briar a una panadería que recién abrieron en la Villa Final del Libro, dicen que el panadero es un artista y que su pan puede capturar perfectamente la esencia que uno desea desde el fondo de su corazón.

-Suena delicioso, pero un poco aterrador -dijo la Hija de la Reina Malvada -Yo por mi parte tengo planeado ir al espectáculo de esgrima que Darling y sus hermanos planean dar en los jardines, ¿No te interesaría ir?

-Ehm… Yo… lo pensare, pero no prometo nada -contestó Apple White ruborizándose y sintiéndose un poco nerviosa debido a que aún recordaba lo que su amiga Rosabella Beauty, Hija de la Bella y la Bestia, le había dicho semanas después del Incidente del Juego de Dragones -No… creo estar lista para hablar con ella, Raven.

-Tranquila, tomate el tiempo que necesites para meditarlo -dijo la joven hechicera acercandose a su amiga para darle unas palmaditas en la espalda y calmar así los nervios que la invadían -Bueno, no queda nada más que…

De repente, el sonido de la puerta abriéndose interrumpió a la Hija de la Reina Malvada, la cual volteó hacia atrás rápidamente solo para ver como a la habitación entraba con premura una anciana de piel blanca y cabellos largos grisáceos, una mujer que tanto ella como su compañera conocían bastante bien debido a que esta solía involucrarse bastante en los problemas que ambas solían ocasionar accidentalmente en los pasillos del colegio.

-Ehm… Madame Yaga, ¿Se siente bien? -preguntó Apple White sintiéndose sorprendida por la inesperada actitud que tenía la vieja bruja y quien se caracterizaba por ser una persona calmada y tranquila.

-No hay tiempo para preguntas, las quiero presentables y lindas a la voz de ya -ordenó Baba Yaga viendo con seriedad a ambas jóvenes -Tenemos un asunto importante que atender hoy y no podemos…

- ¡¿Qué?! Pero… hoy es nuestro día libre y…

-Lo siento, Señorita Queen -interrumpió la vieja bruja -Pero su día libre ha sido cancelado y todos los estudiantes deben estar alistados para una visita importante.

- ¿Visita?, ¿Acaso mi madre ha vuelto a…?

-No, Señorita White -volvió a interrumpir Baba Yaga -Esta vez no se trata de su madre, desafortunadamente para nosotros.

-Entonces… ¿Quién vienes? -preguntaron al unísono ambas adolescentes.

-La Ministra de Educación del Sagrado Concilio de las Historias -respondió la vieja bruja aterrada y casi a punto de morderse las uñas debido al miedo que sentía al pronunciar aquellas palabras.

-Oh… ¡No! -exclamaron las dos chicas viéndose la una a la otra con un rostro que denotaba preocupación, pues ambas sabían que cuando se mencionaban las palabras Sagrado y Concilio juntas era porque algo muy grave estaba sucediendo.

Al final, tanto Apple White como Raven Queen obedecieron las ordenes de Baba Yaga, quien continuó entrando en las otras habitaciones para avisarle al resto de los alumnos que debían estar listos para tan ilustre visita, pero las reacciones de estos fueron más de pánico y miedo que de alegría y regocijo, pues todos ellos sabían que con el Concilio no se debía jugar, sino que, al contrario, se debía guardar respeto y silencio. No por nada los maestros estaban igualmente aterrados, especialmente el Director Grimm que ya podía ver su carta de destitución puesta en el escritorio de su oficina.

- ¿Desde cuándo el Concilio… dejó de confiar en mí?, ¡¿Qué hice mal?! -se preguntaba a sí mismo el Director Milton Grimm mientras bajaba por las escaleras principales para encaminarse en dirección hacia la entrada de la escuela -Se supone que solo sigo el Plan Académico que nos entregaron hace años y no nos hemos desviado de este. ¿Por qué ahora se interesan en intervenir cuando pudieron hacerlo antes?

Mientras el Director de Ever After High continuaba divagando consigo mismo, los estudiantes intentaban formarse frente a la entrada principal, todos esforzándose en mantener el orden y el silencio para evitar cualquier malentendido que pudiera afectar aún más la imagen del colegio, lo cual no era fácil debido a que todos los Herederos eran conscientes de que los últimos acontecimientos ocurridos no eran algo de lo que enorgullecerse.

Los minutos fueron pasando y para cuando el reloj marcaba las ocho de la mañana, todos los estudiantes ya estaban formados y montando guardia frente a la entrada, siendo Daring Charming y su hermano Dexter los que más resaltaban debido a que a la Reina Blanca, la Profesora de Princesiología y Buena Gestión del Reino, le pareció buena idea colocar a ambos en primera fila vistiendo sus elegantes armaduras y empuñando sus espadas, las cuales, según ella, se alzarían para rendirle honores a la Ministra de Educación.

-Buenos días, sea bienvenida Señora Minis… ¡No!, ¡No!, ¡No!, ¡Así no debe ser una bienvenida! -exclamó el Director Milton Grimm dándose de golpes en la frente para luego aclarar su garganta diciendo -Mejor así: Buenos días, Señorita Colel… ¡No!, ¡Así tampoco! -gritó el Director de Ever After High dándose otro golpe en la frente para intentar articular las palabras adecuadas -Quizás… mejor: ¡Bienvenida, Ministra Colel! Es un placer y orgullo que nos honre con su presencia en este majestuoso y hermoso… ¡No!, ¡Es muy cursi y muy tonto!

En ese momento, Giles Grimm, Hermano del Director Grimm, se acercó a su hermano para darle unas palmaditas en la espalda con el fin de calmar los evidentes nervios que este sentía, lo cual para él no era raro, ya que si algo le asustaba a su hermano más que las peleas entre Royals y Rebels era ser llamado a cuentas, y peor aún, ser llamado a cuentas justo frente a sus alumnos y compañeros de trabajo.

-Será mejor que te relajes, Milton -dijo Giles Grimm con un tono de voz que denotaba calma y seriedad al mismo tiempo -No olvides que ella es una ex alumna tuya, así que… puede que no sea necesario el formalismo.

- ¿Estas bromeando, Giles? Estamos hablando de la Ministra de Educación, no de la Reina Blancanieves o de cualquier otro miembro de la Realeza -respondió el Director Grimm tomando a su hermano por los hombros y agitándolo de forma desesperada -Es parte del Concilio y sabes muy bien lo que eso significa.

-Sigo pensando que estás exagerando, Milton -dijo el Subdirector de Ever After High empujando a su hermano para que este lo soltara -Además, ¿Desde cuándo te interesa tanto lo que dice el Concilio?

-Desde que publicaron en La Pluma Dorada el artículo sobre lo ocurrido en el Día del Legado, no tienes ni idea de la cantidad de llamadas y cartas de reclamo que recibí por ese asunto -respondió Milton Grimm quien empezó a comerse las uñas asustado justo enfrente de sus alumnos.

Apple White, Raven Queen, Darling Charming, Ashlynn Ella, Rosabella Beauty, Briar Beauty, Blondie Lockes, Cedar Wood, Cerise Hood y el resto de las alumnas más importantes y populares del Colegio estaban igualmente aterradas, pues todas ellas sabían que eran directa o indirectamente las causantes de haber causado aquel embrollo, especialmente la Hija de la Reina Malvada quien nunca creyó que construir su propio Destino iba a traer consecuencias muy graves a la escuela.

-Realmente estamos en problemas, incluso se nota que al Director Grimm no le cayó muy bien la noticia -le murmuró en voz baja la Hija de la Bella Durmiente a una chica de piel color café claro y cabello largo color castaño con mechones color rojo coral que usaba lentes y la cual estaba parada justo a su lado.

- ¿En serio creías que no iba a asustarse, Briar? -preguntó la chica sintiéndose un poco molesta por las palabras de la Princesa del Reino Beauty -Estamos hablando de la Ministra de Educación, del Concilio. No es algo fácil para nadie y menos para una persona que no ha cedido a las presiones de los miembros más duros.

- ¿Realmente es tan mala persona, Rosabella? -preguntó Darling Charming en voz baja para evitar llamar la atención del resto de sus compañeros.

-No lo sé, mi familia no suele tener mucho contacto con ellos y menos con miembros que ocupan puestos tan importantes como lo es el Ministerio de Educación.

-Sea como sea, no pinta nada bien -dijo Ashlynn Ella interviniendo en la plática que había entre las tres chicas -Aunque… si alguien debería disculparse por todo esto es cierta persona que le gusta grabar y difundir por Espejo-Net todo lo que hacemos diariamente.

-Oye, no es mi culpa que la Ministra de Educación vea mi programa -contestó una chica piel clara y cabello rubio rizado sintiéndose un poco ofendida por la acusación que le hacía la Hija de la Reina Cenicienta -Además, yo al menos no tengo un escándalo del cual avergonzarme.

- ¿Qué… estás insinuando, Blondie? -preguntó Ashlynn Ella enojada y acercandose lentamente a su compañera para verla de frente y encararla.

-Solo digo que el Concilio está interviniendo en Ever After por todos los problemas que han sucedido desde que Raven decidió no seguir su Destino como la Reina Malvada, lo de Hunter y tú solo es un extra para ellos.

-Blondie… ¡Cállate! -gritó una chica de piel color marrón y cabello ondulado color café con mechones color purpura acercandose rápidamente a la reportera del Blog del Espejito para soltarle una cachetada que dejó sin palabras al resto de las alumnas -No es momento para andar repartiendo culpas, tenemos un problema y debemos encontrar la manera de solucionarlo.

- ¡Oye! Tampoco la violencia va a ayudarnos, Cedar -dijo una chica de piel color melocotón y cabello largo color negro con franjas blancas interponiéndose entre ambas chicas para evitar que se siguieran agrediendo -Es momento de calmarnos y pensar con la cabeza fría: ¿Cómo vamos a recibir a esta visita?

-Con… ¿Una calurosa y educada bienvenida? -preguntó Briar Beauty con un tono de voz que denotaba cierto sarcasmo ante la obviedad de la pregunta que hacía su compañera.

-No, no me refiero a eso -respondió la chica -Quiero decir: ¿Cómo le demostramos a la Ministra que todos los rumores negativos sobre la escuela son falsos?

- ¡Con una alocada Fiesta de Té del País de las Maravillas! -exclamo Madeline Hatter saltando y dejando salir su tan característica locura maravillana.

-No… creo que sea el mejor momento para eso, Maddie -dijo Raven Queen acercandose a sus compañeras y colocando su mano sobre el hombro de la Hija del Sombrerero Loco -Lo que Cerise propone es que montemos una serie de demostraciones académicas y deportivas para que la Ministra vea que en Ever After High todo está en orden y marchando perfectamente.

-Ehm… ¿Y crees que nos dé tiempo hacer algo así? -preguntó Apple White igualmente acercandose y con una actitud algo tímida debido a lo grave de la situación.

-Pues claro, ¿Por qué lo preguntas, Apple?

-Bueno, pues porque…

En ese momento, el sonido de unas trompetas interrumpió a la Hija de Blancanieves, quien, junto con el resto de sus amigas y compañeras, pudo ver como por la calle que conducía a la Villa Final del Libro trotaban dos briosos corceles que eran montados por dos caballeros de armadura dorada y en cuyo peto estaba grabado un escudo dentro del cual estaban las figuras de una pluma y un pergamino, ambas relacionadas con el Sagrado Concilio de las Historias.

- ¡Abran paso a la Ministra! -gritó uno de ellos

- ¡La Ministra tiene vía libre! -gritó el otro al tiempo que aparecía detrás de él una limusina negra con detalles hechos de color plata y de cuyos costados se sujetaban una joven mujer de piel blanca y cabello rizado color negro y un hombre de piel morena y cabello corto color gris, ambos armados con varita mágica, pistola y espada.

Al ver el vehículo, todos los alumnos volvieron a formarse en su lugar para guardar silencio mientras que los maestros simplemente tragaron saliva en cuanto vieron como el lujoso vehículo se detenía poco a poco hasta quedar justo frente a la entrada principal.

Fue entonces que el recinto quedó sumido en un abrumador silencio, que se rompió en cuanto la puerta de la limusina se abrió dejando salir a la Ministra Utz-Colel, quien descendió siendo seguida por Bouldrom, su elfo ayudante, y dos escribanos que, con EspejitoPad en mano, empezaron a hacer una detallada descripción sobre las condiciones que guardaba el lugar, en especial la fachada principal que apenas había sido "reparada" tras los acontecimientos del Juego de Dragones.

-Ejem… Es un honor recibirla, Ministra Colel -saludó el Director Grimm haciendo una reverencia y besando la mano de la mujer en cuanto está se puso frente a él -Debo decir que su visita fue inesperada, pero espero de todo corazón que usted se lleve una buena impresión de nuestra amada escuela.

-El placer es mío, Director Grimm -respondió la Ministra de Educación alejando su mano y haciendo aparecer con su cetro un pañuelo para limpiarla, lo cual puso aún más nervioso al Director de Ever After High -Desafortunadamente me han llegado rumores y malas noticias sobre lo que ha pasado últimamente en su escuela, lo cual déjeme decirle no le favorece en nada a su… intachable imagen.

-Bueno, debo admitir que hemos tenido algunos… obstáculos en el camino y…

- ¿Obstáculos? -preguntó la Ministra Utz-Colel arqueando la ceja y viendo con severidad al Director Grimm - ¿Así es como usted ve todos esos incidentes?, ¿El de la Destrucción del Libro de Cuentos Legendarios?, ¿El de la Reina Malvada?, ¿El de los Reyes del Invierno?

-D-Detalles… minúsculos y sin mucha importancia, Señorita Colel -respondió Milton Grimm intentando minimizar los problemas por los que se le señalaba -Nada de qué preocuparse, se lo aseguro.

-Muy bien, Director Grimm -dijo la mujer esbozando una sonrisa maliciosa para después soltar un hondo suspiro diciendo -Entonces, procedamos con su presentación.

-Oh… ¡Claro que sí! Con usted… ¡El Coro! -anunció el Director de Ever After High con orgullo al tiempo que los hijos de los Tres Cerditos y los Trillizos Billy Goats pasaban al frente para sorpresa del profesor.

- ¿Ese es su… coro escolar?

-Ehm… Sí, sí que lo es -contestó el Director Grimm con una sonrisa nerviosa para luego hacerle una seña a Baba Yaga y preguntarle en voz baja - ¿Qué le pasó al Coro Original?

-Lo disolvimos hace años, tú mismo dijiste que no querías gastar el presupuesto en cosas tan banales como la música.

- ¡Ups! -exclamó el profesor acomodándose la corbata para luego acercarse a la oreja de Baba Yaga diciendo -Recuérdeme que tengo que volver a formarlo en cuanto termine la visita.

- ¡Vamos, pequeños!, ¡Canten el himno de su escuela! -ordenó la Ministra Utz-Colel viendo con ternura a los pequeños animales parlanchines.

Tanto los Tres Cerditos como los Trillizos se vieron unos a otros confundidos, pues era evidente que ninguno tenía realmente talento para el canto, por lo que, tras unos segundos de silencio, comenzaron a "cantar". Aunque realmente el cantico solo fue una mezcla de sonidos sin sentido que más que melodiosos eran incomodos y molestos, especialmente para los alumnos y profesores del colegio quienes intentaron cubrirse los oídos para evitar seguir escuchando tan incomodo espectáculo artístico.

- ¡Agh! Creo que lo mejor hubiera sido que cantaras tú, Apple -dijo Raven Queen viendo a su compañera de habitación con una mueca de dolor.

-Concuerdo totalmente contigo, Raven -contestó la Líder de los Royals haciendo la misma expresión que su amiga.

Después de unos minutos, la Ministra de Educación alzó su mano, indicándole así a los seis pequeños animales que debían detener su canto. Posteriormente volteó a ver a sus escribanos y les dijo:

-Anoten esto: No hay Coro Escolar en Ever After High.

-Entendido, su Excelencia -dijeron al unísono los escribanos al tiempo que escribían en sus EspejitoPad las palabras de la funcionaria.

El Director Grimm, por su parte, sacó un pañuelo de uno de los bolsillos de su chaqueta para secarse el sudor que emanaba su frente debido a los nervios. Luego se acercó a la Ministra Utz-Colel y colocándose frente a ella comenzó a guiarla hacia la Entrada Principal de Ever After High para que esta empezara a recorrer los pasillos, todo ello acompañado por el resto de sus alumnos y haciendo uso de palabras huecas tan típicas de un político que intentaba engañar a sus electores haciéndoles creer que todo estaba bien.

-Se nota que el narrador conoce muy bien a las malas hierbas como el Director Grimm -le dijo Madeline Hatter a una chica de piel clara y cabello largo color lavanda que tenía la forma de dos coletas rizadas -Uy… Te está describiendo, Kitty.

-Solo espero que su hámster no dé muchas vueltas hasta marearse -respondió la Hija del Gato de Cheshire mirando hacia el cielo para después continuar caminando junto con el resto de sus compañeros.

La caminata fue bastante tranquila durante varios minutos, incluso muchos de los alumnos parecían disfrutarla debido a que, por primera vez, el Director Grimm se comportaba como una persona amigable, nada que ver con aquel maestro cascarrabias que se la pasaba parloteando del diario con el asunto del Destino que venía con amenaza incluida.

-Nuestra Magibiblioteca es una de las más completas de todo el Mundo Conocido y contiene los conocimientos necesarios para nuestros alumnos -alardeó el Director de Ever After High - ¿No le gustaría conocerla, Señorita Colel?

-Mmm… Director Grimm, yo estudié aquí hace años y puedo asegurarle que conozco tan bien la Magibiblioteca que no necesitó visitarla otra vez -respondió la Ministra Utz-Colel ignorando al Profesor -Todavía recuerdo cuando me castigó solo por preguntarle a un maestro una duda razonable.

-Eh… Eran otros tiempos, Señorita Colel -dijo el Director aclarándose la garganta y acomodándose la corbata nuevamente -Usted sabe que la Educación Fantástica era mucho más rigurosa y mucho más… más…

- ¿Tradicionalista? -interrumpió la mujer deteniendo su andar y viendo con seriedad a aquel hombre -No tenga miedo en decirlo, al menos así sus alumnos podrían ser más considerados con usted y su actitud tolerante hacia los Rebels.

-Sí… ¡Jejejejeje! -rio Milton Grimm esbozando una tímida sonrisa que hizo reír a algunos de sus alumnos -Ehm… Como sea, lo cierto es que no hay problemas y creo que… pasamos la… inspección, ¿o no?

-Puede ser, aunque me temo que tener una Magibiblioteca enorme no es suficiente para cumplir las expectativas -respondió la Ministra de Educación golpeando rápidamente su cetro contra el piso y haciendo que una aura mágica color celeste cubriera a todos los presentes, quienes alzaron la vista solo para ver como un enorme trozo de concreto proveniente del techo había caído sobre ellos sin causar ningún daño gracias al escudo mágico que les protegía -Me alegra saber que mi visita fue oportuna, un minuto más y todos nosotros habríamos terminado en el suelo con daños muy graves a nuestra salud.

-Ehm… Yo… Yo…

-Anoten esto: Infraestructura Deficiente y "Reparaciones" con Mano de Obra de Dudosa Procedencia -ordenó la mujer a sus escribanos quienes inmediatamente procedieron a transcribir las palabras dichas por la funcionaria que continuó caminando por el pasillo, no sin antes levitar los escombros con su magia para posteriormente colocarlos en una de las esquinas.

La Ministra de Educación prosiguió con su recorrido siendo seguida por todos los alumnos y maestros, muchos de los cuales estaban sorprendidos por las increíbles habilidades mágicas que poseía la mujer, siendo un hombre alto de cabello castaño y barba con sombrero quien parecía querer conocer más de cerca a la funcionaria.

-Perdone mi atrevimiento, Señorita -dijo el hombre alto con sombrero acercandose a la Ministra -Pero… ¿Cómo es que usted sabe hacer magia si en su historia no hay un papel que involucre su uso?

-Señor Nimble, los funcionarios como yo no tenemos la necesidad de apegarnos al libreto cuando de nuestra labor se trata -respondió la Ministra Utz-Colel viendo con seriedad al Profesor -Además, el saber magia ayuda mucho en situaciones como la que acaba de pasar. Aunque claro, no hay que abusar de ella, pues no puede resolver todos los problemas de la vida, ¿o no lo cree, Señorita Farrah?

-Este… Sí, estoy totalmente de acuerdo -respondió una chica de piel rosada y cabello ondulado color azul con mechón color lavanda que tenía alas en su espalda y la cual se acercó rápidamente a Ashlynn Ella diciendo - ¿Cómo es que sabe todo eso?

-Es la Ministra de Educación, tiene que estar al tanto de todo -respondió la Hija de la Cenicienta -Aunque… me preguntó: ¿Por qué el techo se cayó si supuestamente las reparaciones eran gratis?

-Ehm… ¿Problemas técnicos? -contestó con una tímida sonrisa una chica de piel grisácea y cabello rubio platino que igualmente poseía alas -Oigan… ¿Yo como iba a saber que las Hadas Mafiosas harían un trabajo tan malo?

- ¿Hadas Mafiosas, Señorita Thorn? -preguntó la Ministra de Educación soltando algunas risas para luego voltear a ver a sus escribanos diciendo -Anoten la causa del derrumbe y adjunten lo siguiente: Las reparaciones fueron hechas por estudiantes inexpertos en la materia, lo que a su vez se considera ilegal y es una forma de desviar los recursos que tan generosamente se otorgan a esta escuela.

-Entendido, su Excelencia -respondió Bouldrom El Elfo asintiendo con la cabeza para después ver con malicia al Director Grimm que para entonces estaba aún más nervioso que de costumbre -Me temo que alguien va a perder su empleo hoy.

-Aún no hemos terminado, Bouldrom -dijo la Ministra Utz-Colel sobando la cabeza de su pequeño ayudante -Puede que el Director Grimm nos tenga algunas sorpresas más, ¿verdad, Milton?

- ¡Claro! ¡Claro que aún hay más por ver! -exclamó el Director de Ever After High levantando su pulgar e intentando sonreír, pero rápidamente su sonrisa se borró para dar paso a una mueca de dolor -Estoy… muerto…

Tras murmurar aquellas palabras, el Director Grimm continuó guiando a la mujer por el resto de la escuela. Visitaron el Encantauditorio y los dormitorios, lo cual le hizo ganarse al Director una felicitación de parte de la funcionaria, pero desafortunadamente para él aquel momento de gloria duro poco debido a que al entrar al Salón de Ciencia y Hechicería Avanzada, el pizarrón tenía inscrito en letras grandes una lista de alumnos donde se señalaba quienes habían aprobado y quienes tendrían que hilar paja para tener puntos extra y pasar la materia.

-Vaya, vaya, vaya, así que los alumnos pueden aprobar si hilan paja para convertirla en oro -dijo la Ministra de Educación negando con la cabeza para luego voltear a ver a sus escribanos nuevamente diciendo -Anoten lo siguiente: Trabajo Infantil, Corrupción y Soborno.

- ¡¿Qué?! ¡No! ¡No son sobornos! -gritó asustado un duendecillo de piel clara con barba y bigote canoso cuyo enorme sombrero le cubría sus pequeños ojos - ¡Son trabajos extra! Trabajos que les enseñaran la dureza de la vida y el valor de esa frase que dice: Es mejor cargar un lápiz que una pala.

-Profesor Rumpelstiltskin, hay otras formas de enseñar esa "Lección" de vida -dijo la Ministra Utz-Colel dándole la espalda al pequeño duende de orejas puntiagudas -Además, de nada sirve hacer esos trabajos extra si al final todo lo que hilan sus alumnos va a parar a sus bolsillos.

-P-Pero… Pero…

-Está despedido, Señor Rumpelstiltskin.

- ¡¿Qué?! ¡¿Cómo dice?!

-Quiero su cubículo vacío para mañana a primera hora, ya traeremos a alguien que si sepa lo que es la pasión por la enseñanza -dijo la mujer dándose la vuelta para dirigirle una mirada un tanto intimidante al pequeño profesor -Debió aprender que los alumnos no son sus esclavos ni sus vasallos. De haberlo hecho esto no estaría pasando.

-Señorita Colel, no sea tan dura con él -dijo Giles Grimm saliendo de entre los alumnos e intentando interceder ante la Ministra -Él es un buen profesor, es solo que su carácter y su relación con el Destino lo han hecho perder la razón en ocasiones.

-Profesor Giles, no se puede tolerar el soborno ni la esclavitud en Ever After -respondió la Ministra de Educación acercandose al hombre de barba y cabello alborotado -Usted mismo sabe que esto es una falta a los estatutos y no puede dejarse pasar.

-Lo sé, Señorita Colel -dijo Giles Grimm -Pero creo que él aún puede ser útil aquí, no olvide que en Ever After High somos todos bienvenidos. Incluso aquellos que son vistos como… anormales.

Tras escuchar aquellas palabras, la Ministra Utz-Colel guardó silencio y agacho la cabeza para después soltar un suspiro y esbozar una tierna sonrisa diciendo:

-A pesar de los años, de las dificultades y de todo por lo que ambos hemos pasado, sigue usted manteniendo esa sabiduría y esa comprensión que ningún otro de nosotros ha logrado demostrar.

-Sé a lo que has venido, mi pequeña flor espinosa -respondió el Subdirector de Ever After High tomando la mano de la mujer para sobarla -Y quiero ayudarte a cumplir ese sueño, el sueño por el que ambos hemos luchado desde hace años.

-Entre Renegados nos entendemos, ¿no lo cree?

-Será mejor tratar esto en privado -contestó Giles Grimm sonriendo al tiempo que volteaba a ver al resto del personal académico -Claro, con todos los demás.

-Me parece una buena idea, Profesor Grimm -dijo la Ministra Utz-Colel asintiendo con la cabeza para luego voltear a ver a los alumnos diciendo en voz alta -La visita ha terminado, vayan y disfruten de su día libre. Espero verlos a todos en el Encantauditorio en la noche para darles un aviso importante.

Tras dar aquella orden, la Ministra golpeó con su cetro el suelo invocando un hechizo protector que cubrió a todos los profesores y personal de la escuela, quienes inmediatamente se acercaron a la mujer que, acompañada por el Subdirector de Ever After High, los guio en dirección hacia la Oficina del Director Grimm para tener una conversación privada sobre las acciones que se seguirían a partir de ahora en el colegio.

- ¿Qué nos irán a hacer, Raven? -preguntó Apple White preocupada y sintiéndose un poco asustada -Nos expulsaran y no tendremos nuestros Finales Felices nunca.

-No lo creo, Apple -respondió la joven hechicera viendo como los profesores desaparecían de la vista de todos -Pero si de algo estoy segura es que esto es solo el comienzo.

Continuara…

Y bueno queridos lectores he aquí el capítulo que desde hacía tiempo quería escribir, realmente fue una semana intensa de escritura, reescritura, desvelos y mucho esfuerzo, pero finalmente se obtuvo el resultado esperado que, aunque largo, creo que dará mucho de qué hablar.

Añádanlo a favoritos, comenten, sigan la historia y espero que les haya gustado.

Sin más que añadir, nos vemos en el próximo capítulo.

Y recuerden: El Fin es Solo el Comienzo.